El Capítulo

Querido diario:

Los cofrades de la Piedad hemos abierto la Cuaresma, camino de la Semana Santa, con el primer capítulo general ordinario, tal y como marcan nuestros estatutos. Previamente, nos reunimos en la eucaristía que ofició en la capilla del Refugio nuestro consiliario don Sergio Blanco. 

Después, como es preceptivo en un domingo así, arrancó la asamblea piadosa a la que asistieron más de ochenta hermanos y que transcurrió en un ameno e interesante intercambio de opiniones. El tema principal del día pasaba por el protagonismo del Hermano Cetro y su informe sobre los actos a celebrar en las próximas semanas. Se acerca la hora y conviene estar preparados.

Por su parte, el Hermano Mayor presentó al capítulo algunos de los asuntos que han sido actualidad en los primeros meses del nuevo año: las novedades del nuevo local o la gestión de la junta respecto a algunos temas candentes de la actualidad cofradiera, quizá fueran los temas que más atención provocaron. Pero hubo más. En el informe del Hermano Mayor también cupo la noticia del nombramiento del hermano Gonzalo de Diego como componente de la Comisión de Comunicación de la Junta Coordinadora de Cofradías. Después de tantos años realizando una magnífica y entregada gestión en el área de comunicación de nuestra cofradía, que tan buenos resultados y tan fundamental ha sido en los últimos años, esa excelencia sin duda no ha pasado desapercibido para los responsables de la comunicación en la coordinadora. Enhorabuena a nuestro querido Gonzalo y los mejores deseos para esta nueva encomienda en la que representará el mejor espíritu de la Piedad en la coordinadora..

En otro orden de cosas, en lo que respecta al local pudimos escuchar al hermano Emilio Faci, asesor técnico de la junta en este asunto, expuso con claridad qué protocolos se van a seguir para la selección del estudio de arquitectos que se encarguen finalmente de las obras de lo que será la sede de la cofradía, algo más que un simple local, mucho más que solo un almacen. Fue una intervención interesante y aclaradora.

La parte más emotiva se produjo cuando el Hermano Mayor recordó a los hermanos fallecidos en las últimas fechas. Hermanos conocidos, muy queridos, a los que despedimos con el corazón encogido pero con la esperanza puesta en la Madre de la Piedad.

Y ya en un ambiente propicio y participativo se atendió a los ruegos y preguntas que interesaban a los hermanos presentes y que siempre constituyen la sal de estas reuniones.

La mañana se completó con alguna cuestión más, con la lectura del acta anterior, la aprobación de altas y bajas y el rezo de las preces habituales. Y ya para casa con la sensación de que ya falta menos. Se acerca la hora..

Hasta pronto diario.

(Continuará…)