Un vía crucis con nuestro estilo

El Vía Crucis del Cabildo Metropolitano que se celebra en el Pilar con el Cristo de la Piedad volvió a ser un momento de una gran belleza plástica y tuvo la elegancia sobria que nos caracteriza.

El Viernes de Dolores Zaragoza estrena Semana Santa. O más bien el Cabildo Metropolitano anuncia su intención de vivirla con recogimiento, con la austeridad nunca exenta de brillantez que caracteriza la Semana Santa aragonesa. Para ello, para anunciarlo públicamente, volvió a organizar un Vía Crucis solemne que, saliendo de la basílica del Pilar, recorre su monumental plaza en una manifestación magnífica de fe que es seguida por una multitud creciente de fieles. El centro del extraordinario vía crucis es, un año más, el Santísimo Cristo de la Piedad, propiedad del Refugio y que este año celebra, como ya es sabido, su setenta cinco aniversario recorriendo las calles de Zaragoza en la madrugada del Viernes Santo a hombros de los cofrades de la Piedad. Los mismos hombres, los mismos hombros, que, una semana antes, en la noche del Viernes de Dolores mecen y bailan con idéntico fervor al Cristo estación tras estación en el incomparable marco de nuestro queridísimo Pilar. Es ya, éste del Cabildo, un vía crucis asentado y esperado en la ciudad. Y no es razón menor el hecho de que sea la cofradía de la Piedad la encargada de organizarlo, llevarlo a cabo, lucirlo y rezarlo. El estilo resulta ciertamente inconfundible y no sólo por los atributos y el propio Cristo. También las formas, las maneras, la seriedad, el movimiento… Es la cofradía de la Piedad llevando a su Cristo por el Pilar. ¿Habrá algo más bonito en el mundo?

Cofradía de Ntra. Sra. de la Piedad y del Sto. Sepulcro